Exposiciones

Enrique Marty

13 Ene. 2017 / 25 Feb. 2017

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La tercera exposición de Enrique Marty en Espacio Marzana responde a la petición por parte de la galería de un proyecto nuevo que se abra a formatos distintos de los utilizados habitualmente por el artista.

Las Realidades Concretas investiga el concepto de la realidad desde el punto de vista de su propia abstracción terminológica. La realidad ha sido descrita y explicada desde puntos de vista distintos según la época o el autor, generalmente de forma insatisfactoria por la aparente imposibilidad de definir o acotar un término para el que el lenguaje no es válido como instrumento.

De esta forma, Marty propone una reflexión en la que el lenguaje, entendiendo como lenguaje cualquier grado de comunicación codificada, está excluido.
Así, el visitante se verá confrontado con un doble juego de exposición a su propia realidad preguntándose cuál es su papel como individuo y qué le define como tal.

El espectador se encuentra con la sala prácticamente vacía. En las paredes hay una serie de códigos URL que son la llave o interruptor que le permitirá acceder a la obra, que no se encuentra en el mismo espacio físico que el espectador, sino en el espacio virtual de Internet.

Esta intervención enfrenta al espectador con el hecho de encontrarse en dos lugares al mismo tiempo; por un lado en el espacio físico de la galería, lugar al que éste se ha desplazado, siendo este desplazamiento un hecho que supone esfuerzo y tiempo y por otro ante la obra que se encuentra en Internet.
Tal contrasentido, el tener que acudir a un espacio/contenedor de arte, para poder acceder a una obra digital es uno de los mayores puntos de interés para el artista como materia de reflexión.
Las galerías y museos solamente ofrecen en sus webs pequeños ejemplos de las exposiciones, Enrique Marty le da la vuelta a ese hecho y sitúa la obra únicamente en internet, en cierta forma “malgastando” el espacio físico.

Es muy habitual encontrar a gente que ya sólo contempla el mundo a través de sus teléfonos inteligentes. En el cine, en el teatro o en exposiciones, es cada vez más corriente ver a quienes consultan Twitter para conocer la opinión de otros sobre la película, representación o exposición que estén viendo en ese momento, o quien en una reunión de amigos envía mensajes de Whatsap a otros amigos, ignorando a los que están presentes.

El artista tuvo una gran impresión al ver una foto tomada en la sala del Rijksmuseum donde se exhibe “La Ronda de Noche”, en esa foto se puede observar a un numeroso grupo de adolescentes absortos en sus teléfonos sin que ninguno mire el cuadro.
Algo paradójico ya que internet se puede consultar en cualquier momento y lugar, en cambio el cuadro físicamente está situado en un lugar al que es necesario desplazarse para disfrutarlo.

La obra se mantendrá viva durante todo el periodo de la exposición, creciendo en extensión y contenido. Reproduciendo ese viaje del visitante hasta llegar al espacio físico de la galería de forma metafórica. Al escanear cada código, se podrá viajar por un mundo que necesita ser descifrado. Un mundo laberíntico que exige encontrar unos patrones de viaje para poder recorrerlo entero.