Del 8 de Febrero al 1 de Abril de 2008.
Las obras más recientes de Carmelo Camacho se exponen en el espacio Marzana de Bilbao en la exposición titulada “HINCAPIÉ (un camión de hormigón, un papel de caramelo)”, dedicada al pintor recientemente fallecido Alberto Datas.
Carmelo Camacho (Valdepeñas, Ciudad Real, 1959) vive y trabaja en Bilbao desde los años 70. Es autodidacta y en 1991 realiza su primera individual en Bilbao, en la desaparecida Sala de exposiciones de La Fundición. En 2000 expuso en la Torre de Ariz de Basauri, en 2004 en las galerías Spiral de Olite y Jamete de Cuenca y sucesivamente, en 2003 y 2005, en la Galería Bilkin de Bilbao que también lo presentó en Arco’03. La Sala de Emergencia de Denia en Alicante expuso sus trabajos en 2005, año en el que también participó en la exposición “bosteko” itinerante por Bizkaia. Durante el año 2007 ha disfrutado la beca de un espacio de cesión en la Fundación BilbaoArte cuyos resultados pueden verse ahora.
Siempre pasional en sus actuaciones, para él “la pintura está unida estrechamente con la vida”. Con una convicción innata, Carmelo Camacho defiende una actitud firme y sincera con la pintura. El artista declara su admiración hacia otros artistas -y muchas veces les rinde homenajes a través de los títulos de los cuadros-, y en esta ocasión dedica este encuentro al pintor recientemente fallecido Alberto Datas al que le unía una profunda devoción.
Como afirma la crítica de arte Alicia Fernández en el catálogo de la exposición bosteko 2005: “Los cuadros de Carmelo Camacho manifiestan el pulso directo que el artista mantiene con la pintura. Mediante la expresividad del gesto, el color espontáneo y la abstracción de las formas construye trabajos vibrantes, en los que se aprecia la temperatura cálida de las sensaciones y el ritmo de los magmas cromáticos”.... Y aunque en algunos casos se advierte la presencia de partes figurativas, plantas o huellas de un paisaje deformado la impronta expresiva domina la superficie final de la tela. Con razón Carmelo Camacho confiesa siempre su admiración por el expresionismo abstracto americano”.